sábado, 6 de abril de 2013
La esperanza.
Después sentirme destrozado, sin vida, sin aliento, sin ganas de
seguir adelante, con una preocupación y una angustia arraigada a mi cuerpo, sin
poder dormir ni pensar bien con lagrimas en mis ojos y con unas enormes ganas
de gritar, sacar de adentro ese vacío que me llenaba en ese instante, estaba en
completa oscuridad y quería ver la luz y me preguntaba por qué razón tenía que
estar pasando por estas penurias, y que se suponía debería de hacer para
superar este trago bien agrio y amargo, estaba desconectado del mundo, me
sentía desubicado totalmente en el espacio como una molécula en el aire
alrededor de millones y millones sin saber ¿Qué se supone estoy haciendo aquí?,
¿Qué debo hacer ahora?, ¿Qué sigue más adelante?. Así pase esa noche en
oscuridad reflexionando sobre mi existencia pues había perdido toda la
esperanza. Al despertar la mañana siguiente ya no sentía angustia en mi corazón
y por fin pude ver la luz en tantas tinieblas y confusión, sabía que la
esperanza nunca se podía perder mientras estuviese vivo y dije: ‘’Mientras
exista vida, hay esperanza’’ luego de decir esas hermosas palabras, vi el
horizonte que se había sesgado en la oscuridad y en plena claridad fluyeron mis
ideas igual que cuando cae las gotas de aguas en la lluvia, sin que nadie las
pueda detener, salí de la desesperación y con una sonrisa en mi rostro
planifique lo que sería mi vida de ahora y en adelante con muchos ánimos de
contagiar a otros, ayudando con sencillas muestras de afecto y unas palabras
tan claras que superan cualquier adversidad en un país donde la política se
hizo cotidiana y está prohibido bajar los brazos y la voz, sobre todo las ganas
de vivir donde realmente esta toda esperanza en los corazones de la gente, es lo único que no se le puede quitar
a nadie, es la esperanza y el amor que es lo que realmente hace poder
imaginarnos un mundo en paz, es la energía que nos mueve a luchar por nuestros
sueños, metas, e ideas, es la fuerza que nos impulsa a lograr todo lo que
buscamos como, un buen trabajo, un auto, una casa, el amor, hasta algo tan
fundamental como alimentarse, por eso nunca pierdas las ganas de vivir, cree
que todos es posible porque mientras creamos que es posible la esperanza
siempre estará allí en nuestros corazones diciéndonos ¡si se puede!, si lo
podemos lograr, si soy útil en este mundo, si tiene sentido que esté vivo, y si
a todo lo que queramos, por supuesto nunca debemos olvidar estas hermosas
palabras: ‘’ Mientras exista la vida, hay esperanza. Y con la ayuda de Dios
todo es posible.
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