sábado, 20 de abril de 2013

Una oración a Dios

Cada día es un milagro del universo, un regalo de Dios, muchos vivimos ajetreados por el estrés de la ciudad, algunos somos olvidadizos o pesimistas ante los eventos que realmente deseamos que pasen pero no hacemos nada o casi nada, para lograrlos nos olvidamos muchas veces de un valor fundamental que siempre debemos tener en cuenta para mantenernos firmes en nuestras metas u objetivos, es la fe acompañada de la esperanza, junto con ellas seguro la constancia no se pierde que es muy importante para conseguir el camino esperado, como todo en la vida nada es fácil sin que haya un sacrificio previo.

Tú y yo tenemos  un sueño distinto pero algo en común queremos ser felices, queremos seguridad, ser amados, ser alguien importante pero alguien importante en la vida en el contexto del amor.

Tú y yo necesitamos del amor porque gracias a él, es que podemos hacer todo, si no hay amor, no hay nada.

Algo importante que no debemos olvidar nunca, es que el amor mas hermoso y bello de todos el que nunca se acaba que es verdadero, es el amor de Dios.

Si sientes que tu vida, no tiene sentido es porque no le has conocido pues te lo presento a Jehová Dios de los ejércitos, rey de reyes, murió en la cruz por ti, para salvarte del pecado a la condenación de la muerte, para que hoy puedas reflexionar y puedas tener vida eterna en paz, sin llanto, ni dolor, sin hambre, sin sed, con mucha alegría.

Una oración a Dios con fe es más fuerte que millones de cacerolas sonando, mas fuerte que millones de gente protestando, es más fuerte que toda la naturaleza junta.

Una oración a Dios es la fe y esperanza puesta en nuestros corazones para cumplir su voluntad, porque el ya conoce nuestras necesidades antes de mencionarlas, nos hace escudriñar nuestros corazones y así saber donde hemos fallado.

Una oración a Dios  es una bendición para nuestras vidas, para nuestros amigos, familiares y gente que aun no conocemos.

Una oración a Dios es el amor que recorre por nuestras venas,  el que hace palpitar nuestros corazones, lo que realmente nos hace felices, nos ayuda a mantenernos firmes en la fe y en la esperanza.

Una oración a Dios es verdaderamente el amor, la energía que nos mueve.

Una oración a Dios es darle gracias a Jesucristo por todo su amor, bendiciones, misericordia que tiene para con nosotros todos sus hijos.
Que dios te bendiga.

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