viernes, 1 de febrero de 2013
Ser un alma rebelde
Sacarte del circulo donde vives no es mi idea, ni ser la oveja negra que pueda destruir ese hermoso castillo donde vives, que puede ser un infierno o un paraíso si no, entiendes tu camino, no quiero sentirme como un alma rebelde, el destructor, la aguja del pajar, solo con mis letras quiero reflejar el ser maravilloso que eres, para que en los momentos débiles puedas recordar lo valiosa y fuerte que eres sigas tu camino y así puedas decidir cual es tu verdadero destino. Una cosa he aprendido en los caminos de Dios vamos a encontrar todas las respuestas a nuestras preguntas aunque muchas de esas preguntas te lleven a un vació, ya sea por falta de conocimiento o por un misterio que aun no ha sido revelado pero estén seguros que si una misión tienen no es solo aprender a vivir para resolver problemas diarios, mas bien para aprender amar a nuestros hermanos, amigos, padres a nuestro enemigo que muchas veces somos nosotros mismos. Encontrar la paz y la felicidad es un camino largo pero posible. Comienza por pensar y darte cuenta el valor que tienes y si todavía no lo vez, relájate mas y vuelve a imaginar estas palabras. ¡Si estoy vivo es por que soy importante y mi vida tiene mucho valor! No podemos pensar diciendo que la vida es una sola y hay que vivir al limite, porque es un gran error analizar las cosas de esa manera. La vida es un gran regalo de Dios donde sufrimos, lloramos, reímos, algunos cantamos, bailamos, somos rebeldes muchas veces en nuestra vida pero no por eso vamos a excusarnos para hacer cosas terribles. Debemos aprovechar este momento para buscar la paz y la felicidad valoremos con verdadera gratitud lo que somos y tenemos, empecemos por entender que el amor no se trata solamente de una etapa de enamoramiento muy linda. la clave de todo esta en el amor porque gracias a el, es que podemos movernos es por el que hacemos todas las cosas y es por el que podemos ser felices y encontrar la paz en nuestras almas compartiendo con nuestros prójimo con las mas sinceras intenciones dejando de ser un alma rebelde y entregando nuestros corazones a Dios podemos ser realmente felices.
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